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Pescadores de Puerto Bolívar desmembrados a tiros
Se les llevaron el motor, pero los agentes indagan más que un robo porque en la panga quedaron restos de dentadura, masa encefálica y piel
El mar de la zona costera de la provincia de El Oro se salpicó de sangre. Un grupo de piratas interceptó la embarcación Mis Tres Amores, en la que navegaban tres pescadores de la parroquia Puerto Bolívar del cantón Machala, y tras asesinarlos los lanzaron al agua. A la deriva quedó la panga llena de sangre y restos humanos.
Angélica Banchón, esposa de una de las víctimas, indicó que su conviviente José Leonardo Peña Montesdeoca, más conocido como Chango, salió de casa la noche del miércoles 16 de febrero junto a Jean Pierre Santacruz, alias Orejitas, y Nixon Zambrano, alias Pigua, a faenas de pesca.
Se presume que al retornar fueron interceptados por los llamados piratas de mar, a quienes les dicen Los Negros. Pero previo a esto, Chango habría tomado su celular para marcarle a su esposa y dejar abierta la llamada con la finalidad de que escuche todo lo que iba a pasar.
La desesperada mujer salió en busca de ayuda, pero no habría encontrado a nadie que pueda ir en auxilio de su amado.
Una fuente policial contó que la señora escuchó los momentos en que su esposo imploraba para que no lo maten.
De lo que se supo, la llamada estuvo abierta por aproximadamente 30 minutos y no solo el dueño del móvil imploraba por su vida, sino también sus dos compañeros.
Sin embargo, los ruegos no compadecieron a los asaltantes, quienes al final realizaron varios disparos y acto seguido todo quedó en silencio.
Agentes de la Dirección de Muertes Violentas de El Oro se trasladaron al barrio 5 de Diciembre, a donde llevaron la panga. Ahí, con los de la Unidad de Criminalística, levantaron indicios, entre ellos restos de dentadura, masa encefálica y piel.
Se indicó que los criminales se sustrajeron el motor fuera de borda; sin embargo, los investigadores están descartando la hipótesis del robo debido a que en la embarcación quedaron huellas de ensañamiento contra las víctimas.
Hasta el mediodía del jueves 17, los cuerpos no aparecían. (DAD)