La jornada de movilizaciones indígenas arrancó pasada las 10:00 de hoy 27 de junio de 2022. Los manifestantes salieron desde los “Centros de Paz” y se reunieron en los alrededores de la Casa de la Cultura, pese a que en los quiteños existía el optimismo de que sea el fin de las protestas, tras el anuncio presidencial de reducir el precio de los combustibles.

En los alrededores de la Universidad Central del Ecuador, varios propietarios de locales comerciales abrieron sus puertas e iniciaron los trabajos de limpieza en las fachadas, que resultaron afectadas.

En medio de las movilizaciones hacía los alrededores del parque El Arbolito, a la altura de la calle Versalles, varios ciudadanos que se transportaba en sus vehículos fueron atacados por vándalos que, con cuchillos, picharon las llantas de sus automóviles. 

“Nos rodearon el carro como 10 personas cuando el semáforo estaba en rojo y esperábamos que pase la muchedumbre. No salimos de nuestra casa porque queremos, sino porque tenemos una cita médica con un niño discapacitado y nos hacen esto”, relató una mujer que iba en unos de los cinco autos afectado. Otro de los vehículos fue uno nuevo que había sido retirado de la concesionaria que estaba a pocos metros.

“¡Son 10 puntos, no son 10 centavos!”, esa fue la principal frase que gritaban los manifestantes cuando empezaron a caminar hacía el Centro Histórico de Quito. La multitud –evidentemente reducida a diferencia de hace tres días- estaba conformada en su mayoría por personas indígenas y amazónicas.

Ellos caminaron por la avenida 10 de Agosto, hasta llegar a la Plaza de Santo Domingo. En medio camino, se unió su máximo líder, Leonidas Iza. A quien le custodió una “guardia indígena” de al menos 20 personas a su alrededor.

El dirigente dialogó con un representante de la Policía para que se les permita pasar por una calle aledaña al Palacio de Carondelet que estaba bloqueada con vallas metálicas, pero fue negado. A cambio se les ofreció transitar por otras vías desbloqueadas acompañados por motorizados de la institución hasta llegar de nuevo a la Casa de la Cultura. Y así ocurrió.

Iza con un megáfono aprovechó para solicitar calma a sus seguidores y que la movilización sea pacífica. “Por favor, cuiden a cada uno de los integrantes de nuestras organizaciones. Para lo cual también pedimos que, si de pronto hay algún infiltrado o alguna situación (de violencia), lo identifiquen, compañeros. Muchas veces provocan otros y lo pagaderos somos nosotros”, dijo.

Por primera vez se utilizaron otras calles del casco colonial. Pasadas las 14:00 la movilización llegó hasta el parque El Arbolito sin que se registren incidentes o enfrentamientos. Fue del todo pacífica.