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Familia
¿Qué hacer si sus padres se divorciaron, viven en la misma casa y no se hablan?
Primero que nada, por salud mental, busquen ayuda profesional. Segundo, que los hijos no se conviertan en mensajeros o recaderos de los progenitores
Papá está en la misma sala que su exesposa y esta le expresa al hijo: “Dile a tu padre que hay que pagar los servicios básicos”. ¡Le aplicó la ley del hielo! Podría habérselo manifestado directamente a él, pero desde la separación, ‘le tiró bandera negra’ y emplea a su retoño como mensajero.
“Esta situación es incómoda y los vástagos experimentarían confusión y ansiedad, al ser testigos de esta inusual convivencia entre padres”, señala la psicóloga clínica y catedrática Marcia Colmont.
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Los hijos puede llegar a experimentar sentimientos de lealtades divididas, ‘tomarían partido’ por uno de los padres, dice la experta, quien menciona que la expareja podría vivir bajo el mismo techo por motivos como: no tener dinero para irse a otro lado; la casa podría estar en disputa (como bien adquirido en el matrimonio); por asuntos sociales (el qué dirán); o incluso, porque se tendría una pequeña esperanza de que se dé una reconciliación.
Su colega Christian Montero aconseja que una vez divorciados, uno de los dos se vaya de la vivienda, porque podría darse el caso de que el otro desee volver a enamorarse y eso generaría conflictos.
- EXTRAtips
1. Reciban terapia de pareja, antes de separarse. Así sabrán si realmente quieren divorciarse o llegar al perdón y reconciliación.
2. No discuta ni margine a su ex frente a su hijo. De por sí la situación ya es penosa para él, como para que le añadan más incomodidad. No lo excluya de algún plan familiar, ni lo deje sin comer, solo porque no se lleva con él o ella.
3. No cree bandos entre los parientes. No busque aliados para que le ‘acoliten’ en la ‘guerra’, no los ponga en el compromiso de elegir por quién se van. Antes priorice el respeto y el bienestar familiar.
4. Usted es hijo, no recadero. Fije límites claros, expresando de forma frontal que no se va a prestar para ser el mensajero de ninguno de sus padres. Si tienen que comunicarse algo, que lo hagan directamente entre ellos. Tampoco vea esta dinámica como ‘normal’, ni repliques este estilo de convivencia.
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