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Paco muestra lo funcionales que pueden ser sus prótesis.Cortesía

Paco el Morlaco: La increíble historia del joven que forja prótesis sin su mano derecha

Este hombre, que perdió una mano en un accidente, ahora elabora prótesis de bajo costo para donarlos a quienes más los necesiten

A finales de 2013, Paco, de tan solo 13 años, perdió su mano derecha mientras jugaba con pirotecnia junto a sus panas del barrio Yanuncay, en su natal Cuenca. Lejos de rendirse, hoy dedica su tiempo a crear prótesis funcionales de bajo costo, brindando esperanza y autonomía a personas que no pueden costear prótesis carísimas.

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Detrás de este proyecto social se encuentra Pedro Francisco Brito (24 años), conocido en redes sociales como Paco el Morlaco, quien ha conquistado a más de 600.000 seguidores en TikTok con su contenido motivador y creativo.

Brito relata que la idea de crear prótesis surgió durante la pandemia de covid-19. “Quería realizar mis actividades diarias y desenvolverme como lo hacía antes, por lo que intenté hacer ejercicio, pero cuando quería levantar pesas no podía. Fue así que creé una herramienta que me permitiera hacerlo”, recuerda.

Paco tiene una prótesis para trabajar en su peluquería.Cortesía

Su primera prótesis la elaboró con el tronco de un árbol de eucalipto. Tenía cinco dedos y podía abrirse y cerrarse, permitiéndole levantar pesas, como él deseaba.

Se cansó de las prótesis estéticas

Luego de su accidente de ‘pelado’, los padres de Paco intentaron comprarle una prótesis funcional, hasta que se dieron cuenta de que el valor superaba los 80.000 dólares. “No era asequible para nadie de mi familia”, agrega.

Entonces, sus familiares optaron por una prótesis estética de unos 8.000 dólares, pero Paco no estaba satisfecho. “No cumplía con mis necesidades. Me di cuenta de que las prótesis del mercado son bonitas, pero no funcionales”, explica, y añade que solo hasta los 15 años de edad utilizó prótesis estéticas.

Su experiencia lo motivó a crear prótesis funcionales, aunque rústicas. Estas le han permitido realizar actividades como hacer ejercicio, andar en bicicleta, trabajar y agarrar objetos.

“No vendo las prótesis, trato de donarlas”, afirma Paco. A través de su cuenta bancaria y redes sociales, recibe donaciones para reunir fondos y costearlas. Para financiar su proyecto también ‘camella’ como peluquero canino en su negocio @GuaGuauEc en Cuenca.

Las prótesis que Paco elabora y dona tienen un costo que oscila entre los 50 y 200 dólares. Para su fabricación, emplea una variedad de materiales como resina de poliuretano, acrílico, aluminio, bronce y madera.

El compromiso social de Paco el Morlaco ha ayudado a que varias personas recuperen la independencia de sus movimientos, como Maykel, un pequeño de nueve años que acompañó a Paco a fabricar su propia prótesis, la cual necesitaba para cumplir su sueño más grande: volver a andar en bicicleta.

Junto al pequeño Maykel, a quien le donó una prótesis.Cortesía

Gracias a su dedicación y generosidad, Paco no solo ha transformado su propia vida, sino que también ha inspirado a muchos otros a enfrentar sus desafíos con valentía y creatividad. Sus prótesis no solo son herramientas funcionales, sino símbolos de solidaridad. Paco el Morlaco se ha convertido en un ejemplo de cómo una tragedia personal puede ser el catalizador para un cambio positivo y significativo en la comunidad.

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