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El cadáver del cóndor hembra permanece en el zoo de Quito, mientras se le realiza la necropsia.Cortesía

¡Ojo a los cóndores andinos!

La cacería y el envenenamiento no son los únicos peligros para esta ave emblemática. También la falta de alimento los obliga a acercarse a las zonas pobladas. En el país solo hay unos 150 ejemplares de la especie.

Hoy se le realizará la necropsia al cóndor hallado en Imbabura el viernes pasado. Martín Bustamante, secretario del Grupo Nacional de Trabajo del Cóndor Andino (GNTCA), explicó que debido al estado de descomposición del ejemplar encontrado ha sido difícil definir la causa de su muerte. Sin embargo, por el momento, no se han identificado huellas de violencia en el cadáver de la hembra adulta.

El cuerpo permanece en el zoológico de Quito, situado en Guayllabamba, al norte de la urbe. Allí, un equipo técnico le realizó rayos X en busca de perdigones. Hasta el mediodía del domingo no estaban listos los resultados de ese análisis.

Bustamante mencionó que fueron los residentes del sector de Vilque, en la parroquia de Cahuasquí, quienes descubrieron los restos desmembrados del cóndor.

“Habría sido atacado por perros. Esto pudo ser posterior a la muerte”, analizó. En lo que va del año, este es el primer cóndor hallado muerto en Ecuador.

En las últimas horas, en Vilque se realiza un barrido para encontrar indicios (perdigones o carroña envenenada) y así determinar lo que pudo haber pasado con el cóndor hembra.

"Al momento, por el color del plumaje sabemos que se trata de un cóndor adulto. Al parecer estuvo muerto desde el martes”. 
Martín Bustamante

Y aunque por el momento se desconocen las causas precisas del deceso (naturales o violentas), la preocupación por el futuro de la especie es latente para el GNTCA.

Se estima que en el país existe una población menor a 150 aves de este tipo. “Necesitamos muchísimos ojos para cuidar a los cóndores... El plan de acción para conservar al cóndor incluye investigación, educación, comunicación. Algo que es importante es que hoy existe mayor nivel de conciencia y cuidado de la especie”, sostuvo.

Sin embargo, todavía hay quienes disparan al cóndor porque sienten que representa una amenaza para sus animales de cría, según Bustamante.

Fue ubicado por los moradores de Vilque, en Imbabura. Su cuerpo estaba mutilado.Cortesía

Los peligros

Pero la cacería y el envenenamiento no son los únicos riesgos a los que se exponen los ejemplares, cuya población predomina en Pichincha, Napo, Cotopaxi e Imbabura. En septiembre de 2020, Iguiñaro (el décimo sexto cóndor marcado con banda alar y rastreador satelital) fue encontrado sin vida. Murió de inanición, según los análisis forenses.

Es así como el no encontrar alimento constituye otro peligro para el cóndor. Esto lo pone en la necesidad de acercarse cada vez más a las zonas pobladas para encontrar comida, lo que incrementa su exposición.

La restauración del hábitat de estas aves es uno de los ejes de acción del Grupo Nacional de Trabajo del Cóndor Andino para conservar la especie, que fue catalogada en peligro crítico de extinción, según el Libro Rojo de las Aves del Ecuador (2002).

Según Bustamante, en 2023 se llevará a cabo un nuevo censo del cóndor para actualizar su conteo y situación. “Solamente el 12 % o 15 % de ellos están marcados y registrados satelitalmente”, finalizó.

La Especie

Un ave singular

El cóndor andino es una de las aves voladoras más grandes y pesadas del mundo. Puede medir hasta 3,50 metros (entre las puntas de sus alas abiertas) y pesar hasta 15 kilos.

Esta especie contribuye con la limpieza natural por su consumo de la carroña de animales que mueren en el campo, cumpliendo con la función de eliminar restos orgánicos y contribuir a su reciclaje.

El Ministerio de Ambiente emitió un comunicado ante la muerte de este último ejemplar, en el que enfatizó que este caso debe ser esclarecido, para definir las acciones en el marco de la normativa ambiental.