Los moradores de la urbanización Los Mastodontes, ubicada en el norte de la ciudad, están hasta la coronilla de la delincuencia. Y mucho más desde que ocurrió un crimen al interior, en el portal de una de sus viviendas.

Sucedió el pasado 31 de agosto, cuando una moradora fue atacada con un puñal, al parecer, por delincuentes que habrían querido robarle. “El hecho sucedió cuando ingresó a su domicilio y es lo único que supimos, porque todo está en investigación de la Policía”, cuenta Washington Bonilla, de 65 años.

Él es vecino de la víctima a la que apuñaló un sujeto y que luego huyó en un vehículo. Lo más preocupante para este habitante fue que el crimen se registró a unos 70 metros de su casa.

“Todo es producto de la inseguridad que estamos viviendo en nuestro sector, así como en todo el país”, precisa Bonilla, quien se reunió con otros residentes para definir alguna medida para frenar la delincuencia en la urbanización.

Los delitos

¿Cuál es la problemática? Pues los residentes se exponen a diversos inconvenientes. Uno de ellos es un paso que existe entre esta urbanización y Carcelén Bajo.

Por allí avanzan las motocicletas sin respetar que se trata de un tramo peatonal. Eso permite una fácil huida de los ladrones cuando actúan en ese punto.

El otro problema, según la gente, es que es el único sector que no cuenta con una puerta para controlar el ingreso de las personas. Se trata de la quinta transversal y la entrada está justo en una calle por donde también circulan vehículos que llegan desde zonas como Carapungo, San José de Morán y Pomasqui.

“Es un sitio de paso hasta para los criminales. Por eso hemos pedido que se concrete la iniciativa de volver a colocar una puerta que pusimos hace tiempo, pero que luego fue retirada por las autoridades”, detalla Ramiro Barriga, de 70 años, quien vive poco más de dos décadas en ese lugar.

El morador explica que en ese sitio existen los atracos a las personas y también se han dado ‘incursiones’ a domicilios para robar. “Pero lo que más nos preocupa fue el crimen de la moradora. Estamos expuestos”, dice Barriga.

Por ahora se sigue gestionando la colocación de una puerta al ingreso de la quinta transversal para frenar, en algo, los delitos que tienen en zozobra a los residentes de la urbanización Los Mastodontes.

Sin embargo, cuando se hizo el retiro, en julio de este año, las autoridades de la Agencia Metropolitana de Control (AMC) especificaron que se estaba cayendo en una contravención. “Además, aísla a los habitantes y reduce la capacidad de respuesta de las instituciones ante posibles emergencias”, dijo en ese entonces el ente.

Para retirarla participaron 20 policías nacionales, 15 agentes del Cuerpo de Control Metropolitano, funcionarios de la Empresa de Obras Públicas, inspectores de la Agencia Metropolitana de Control y personal de la Administración Zonal La Delicia.