No era la primera vez que Samuel Holguín supuestamente amenazaba de muerte a su cuñada María Germania Chóez, de 36 años y oriunda de Valle de la Virgen en Pedro Carbo. Sin embargo, en esta ocasión la ‘advertencia’ fue consumada. 

María, como la llamaban en la manzana 366 de la cooperativa Gallegos Lara, en el noroeste de Guayaquil, estaba por terminar de cocinar el almuerzo. Como ya estaba desocupada, decidió ir a donde una vecina que le había pedido ayuda. Solo tenía que cruzar el callejón en el que está su casa. Tomó a su bebé de dos años y salió. Entonces, Samuel apareció por la ventana de su vivienda, contigua a la de Germania, y le habría disparado.

Su hija mayor, de 13 años, estaba en la cocina de su casa y, al asomarse por la detonación, vio que era su madre la que estaba en la mitad de la calle con un tiro que entraba por su sien derecha y salía por su mejilla izquierda; mientras que, parada a un lado, su hermanita le preguntaba a su mami qué le había pasado y le pedía que se levantara.

Su allegada Lisette Arias -prima de Abel, quien es esposo de Germania- también escuchó el tiro desde su casa, al otro lado del hogar de la familia Holguín Chóez. Rápidamente salió a revisar qué sucedía y vio que su primo Samuel, conocido en el sector como Culebra, corría con una camiseta amarilla en su hombro con dirección a un puente que está detrás de su casa y que conecta con la calle principal, que está a siete minutos de la vía Perimetral.

“Nadie sabe por qué hizo eso. Ella ni siquiera se metía con él porque sabía que es violento e, incluso, ya la había amenazado. Él nunca le tuvo estima a Germania en los más de 14 años que fue pareja de mi otro primo”, contó Lisette. Indicó que desde que el implicado salió hace tres meses de la ‘Peni’, luego de haber sido aprehendido por tráfico de drogas, notó que estaba armado. 

“Él es consumidor desde que tiene 12 o 13 años. Mi hijo menor de edad y yo nos hemos ganado amenazas también y, a pesar de eso, igual le he dicho que cambie, que Cristo lo ama”, dijo Víctor Arias, tío del sospechoso. 

Lisette contó que las hijas y esposo de Germania están muy tristes por lo sucedido. “La mayor oraba anoche, le pedía a Dios que le regresara la vida a su mamita”, expresó afligida. 

El velatorio se realizará en la casa de una vecina, quien puso su inmueble a disposición porque Germania “era muy querida por todo el barrio”. Además, recogieron billete para los gastos mortuorios. 

Su sepelio será en Valle de la Virgen porque su madre, quien llegó a Guayaquil la noche del martes, desea sepultarla en su tierra.