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¡Entre la vida y el ‘cushqui’!
En Quito se analizará un eventual cambio en la movilidad por pedido del sector productivo. Especialistas opinan que debe mantenerse por la pandemia.
La restricción vehicular por la pandemia se extiende en Quito, dividiendo las opiniones a favor y en contra. La medida se tomó para mermar el número de contagios por COVID-19, incremento que se está viviendo tras el fin del estado de excepción.
El sector productivo es el más interesado en que se elimine la restricción. Patricio Alarcón, presidente de la Cámara de Comercio de Quito (CCQ), detalla que es ilógico mantenerse de ese modo si, al final de cuentas, la gente tomará un bus para ir a sus trabajos o a otras actividades.
Por ende, el riesgo de contagio, a su criterio, es mucho mayor. “La flota del sector productivo solamente es del 4 % del total en Quito”, señala.
Para él, se debe retornar al ‘Hoy no circula’, “medida a la cual nos adaptamos”. La razón es que anteriormente un vehículo no se movía un día. Con la metodología de placas pares e impares un auto no circula, al menos, tres veces por semana. “Necesitamos estabilidad para hacer negocios”, añade.
La circulación actual es de más de 300 mil automotores con la medida implementada. Antes bordeaba el medio millón (ver infografía), por lo que está activo tanto el transporte de buses públicos y privados, pero con aforos controlados.
Guillermo Abad, secretario de Movilidad del Municipio, dice que lo que se está haciendo es velar por la salud del 70 por ciento de capitalinos que no tiene auto propio. “Sabemos que solo el 22 % tiene un vehículo particular. Ahora los tiempos de movilidad en la ciudad son más cortos”.
Además, si se vuelve al ‘Hoy no circula’ la productividad también se detendría, según Abad. Esto por los altos niveles de congestión vehicular. “Solo en el caso de Quito se puede perder hasta 180 millones de dólares al año por este problema”.
Por ahora el Municipio analiza un eventual cambio en la movilidad tras reunirse con Alarcón.
Buscar alternativas
Carlos Poveda, gerente del Consorcio de buses Sur Occidental, dice que la congestión vehicular se agravaría si se elimina la restricción actual. “Si los autos privados salen ocuparán más espacio y más vías”.
Como resultado, según Poveda, aumentará el tiempo de viaje de un bus, así como la permanencia de los pasajeros dentro de los mismos. “Y eso sería un detonante para que se incrementen los contagios”.
Y las cifras de un aumento lo demuestran. Según el Comité de Operaciones de Emergencia provincial, hasta el miércoles hubo 32.543 infectados en Quito. Un día antes la cifra era de 31.041, es decir que incrementaron 1.502 personas con COVID-19.
Para Cristóbal Buendía, presidente del Observatorio Ciudadano de Movilidad, el sector productivo debe buscar alternativas. “Es un tema de prioridades de lo económico y la salud. Para nosotros, indudablemente, primero están las personas”. Y para eso el sector productivo tiene que acoplarse a la situación que se está viviendo, dice. Agrega que se deben reforzar actividades como el teletrabajo y lo que se está aplicando para activar la economía.
“Son herramientas que permitirán un movimiento económico salvaguardando la salud de la gente”, concluye.
presidente de la Cámara de Comercio de Quito
secretario de Movilidad del Municipio de Quito