Junto a su inseparable ‘amiga’, una botella de plástico con licor, un grupo de personas ‘gobierna’ en la esquina del antiguo mercado municipal del cantón Durán, ubicado en las calles Babahoyo y Manabí.

Son vendedores de mariscos, carnes y demás productos que ahora se expenden en el nuevo mercado de Las Manuelas, pero ellos se rehúsan a marcharse de los exteriores del antiguo centro de abastos César Yánez.

“Nosotros no le hacemos nada malo a nadie, solo nos pegamos unos tragos y a las dos de la tarde nos vamos cada quien para su casa”, indicó Seco de Chivo, como se identifica uno de los que ‘paran’ en la esquina del mercado.

“No me dejan trabajar en el nuevo mercado, por eso me quedo acá, donde aún colocan ciertos locales y me hago algo de dinero”, aseguró Juan Carlos Vera, cargador, mientras bebía con sus ‘panas’.

Él antes ganaba hasta 20 dólares al día, pero ahora no llega ni a las 5 ‘latas’.

Pero no solo los ‘chupadores’ se han adueñado del sector, según moradores, los consumidores de drogas causan temor, tanto que la gente debe caminar por la calle porque ellos agarran las veredas como camas para dormir.

“Hasta el momento no han robado a transeúntes, pero entre ellos discuten y arman peleas. Los policías los botan y ellos al rato regresan como si nada a seguir consumiendo y durmiendo en el piso”, comentó una vecina que por temor a represalias evitó identificarse.

NO EXISTE DISTANCIAMIENTO

Y si la borrachera, el desorden y la droga ‘zumba’ afuera del viejo mercado, la COVID-19 ‘juega al pepo’, ya que no se respetan las medidas de bioseguridad.

Un policía se percató que entre los bebedores no había el distanciamiento social y les pidió que se retiraran del sitio. Pero en cuanto se fue el agente, volvió el relajo.

REMODELACIÓN INICIARÍA EN JULIO DE ESTE AÑO

El director de Obras Públicas del Municipio de Durán, Héctor Velasteguí, indicó que en la actualidad una consultora realiza estudios para la remodelación de dicho mercado.

“A finales de marzo nos entregarán el estudio, luego pediremos un crédito para la remodelación. Los trabajos iniciarían entre julio y agosto, es decir, para inicios de 2022 funcionaría nuevamente el mercado”.

Sobre la aglomeración de comerciantes en la vieja estructura, el funcionario dijo que “la mayoría de ellos tienen sus bodegas en viviendas cercanas, de donde sacan sus productos a la venta, por ello aún se ve comercio en el sitio”.