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Matanza en la Trinitaria: Un policía que ya se había salvado de un atentado, entre las víctimas
A bala sujetos en motocicleta y en carro acabaron la celebración por un cumpleaños. Siete personas aún están heridas.
Fue una verdadera masacre. Personas ensangrentadas, tiradas en el piso, dentro y fuera de una casa, donde minutos antes habían bailado, bebido y disfrutado de un cumpleaños.
Los gritos de auxilio de los familiares de los baleados se escuchaban a más de una cuadra de distancia. Este hecho, que hasta el cierre de esta edición había dejado 5 muertos y siete heridos, se registró a las 10:30 de este domingo 4 de junio, en la cooperativa Independencia 2, de la isla Trinitaria, sur de Guayaquil.
Dos de las doce víctimas quedaron sobre la vereda de la casa de dos plantas, otras diez personas fueron trasladadas en ambulancias y por sus propios medios hasta una casa de salud. Sin embargo, dos horas después se corroboró el deceso de otros tres ciudadanos, entre ellos un policía en servicio activo.
Testigo contaron a EXTRA que los asesinos llegaron a bordo de tres motocicletas y en un carro negro. Más de tres hombres descendieron de los vehículos y atacaron no solo a quienes estaban en la parte exterior del inmueble, sino que entraron a la casa y allí dispararon a las otras personas.
“Desde la noche anterior los estaban ‘cazando’. Los vimos merodeando el sector, daban vuelta en moto y en carro. Estas personas se amanecieron en el festejo, también celebraban el triunfo de Emelec sobre Barcelona”, dijo el morado.
El coronel Fabary Montalvo informó que en la escena del hecho fallecieron un hombre y una mujer, y que el policía asesinado, Álex Antonio Segovia Zúñiga, prestaba sus servicios en el ECU-911 de Samborondón y que se encontraba en sus días de descanso.
Las otras víctimas mortales son José Felipe Bravo Bueno, Jorge Alejandro Quevedo Veas, Allan Marvin Barcia Alvarado y una mujer, quien aún no había sido identificada.
Otra fuente policial reveló que el agente fallecido ya había sido víctima de un atentado, el año pasado, y que sabía que no podía visitar el sur de Guayaquil. “No sabemos qué problema tuvo, pero lo querían matar, ya se había salvado”, dijo.