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Bumblebee, de los Transformers, se roba las miradas de los visitantes de la Ruta de los Gigantes del Suburbio, por su realismo.Carlos Klinger / EXTRA

Guayaquil: Las habilidosas manos detrás de la elaboración de los Gigantes del Suburbio

Cuatro familias artesanas cuentan cómo fue el proceso de creación de los ‘viejos grandotototes’.

La atención de los guayaquileños pasó de los pesebres, los regalos y Papá Noel, a la pirotecnia, los calzones de colores y, en especial, los monigotes gigantes que adornan el suburbio porteño.

Son 16 ‘viejos’ de dantescas proporciones, distribuidos en algunas calles como la 15 y 16, entre Alcedo, Pedro Pablo Gómez, Ayacucho y Huancavilca, al suroeste.

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Esta actividad tradicional, que se inició en 2015 y forma parte de lo que se conoce como Ruta de los Gigantes, es organizada por la Empresa Pública Municipal de Turismo, Promoción Cívica y Relaciones Internacionales de Guayaquil, la cual este año entregó un incentivo de 10.000 dólares a la Asociación de Artistas de Monigotes Gigantes de Guayaquil, que reúne a los artesanos que se dedican a la elaboración de estas ingeniosas creaciones.

Los favoritos del público

Juan Salazar posa junto a sus creaciones del universo de Mario Bros. Bowser, la pieza central de su colección, tiene ojos que brillan y lanza humo por la boca.Carlos Klinger / EXTRA

Para este año, las figuras de la película de Mario Bros son las que han tenido mayor acogida por parte del público. Por ese motivo algunos artesanos han centrado sus esfuerzos en la creación de estos personajes. Así, en la 14 y Pedro Pablo Gómez, Juan Eduardo Salazar ha elaborado junto con su hermano un año viejo del personaje Bowser (conocido como Koopa en nuestro país), el cual le tomó un mes y medio.

"La Ruta se inauguró el 22 de diciembre, pero recién el 26, luego de Navidad, la gente empezó a llegar en mayor número”.Erwin Carpio, monigotero

“Trabajamos en el tiempo libre. Para hacerlo más realista, le pusimos una cámara de humo en la boca y focos rojos para que les brillen los ojos. Entre todo nos gastamos unos 600 dólares”, explica Salazar, quien además asegura que el tiempo y dinero invertidos valen la pena, pues al final le termina dejando una ganancia neta de entre 1.000 y 1.300 ‘latas’.

En la misma calle, a pocos metros de distancia, está el gigante de otro personaje de esta saga, Toad (Honguito, para los ecuatorianos). Mide unos 6 metros de altura y fácilmente duplica la estatura de Bowser. “Lo hicimos mi hermano, un amigo y yo en dos meses y medio. Lo más complicado fueron los cables para pararlo, por el tamaño. Tuvimos que pedirle a la gente del barrio que nos apoye para lograrlo”, cuenta su creador, Julio César Briones.

El monigote ’Honguito’ es de los más grandes de la Ruta de los Gigantes del Suburbio.Carlos Klinger / EXTRA

Para alentar que las familias visiten la Ruta de los Gigantes, se ha fijado el precio de las fotos en $ 1, ya sea por persona o en grupo.

Amor al arte y el espectáculo

El batimóvil tiene detalles realistas, como llantas de verdad. Además, reproduce el sonido de un motor.Carlos Klinger / EXTRA

Algunos gigantes del suburbio destacan por la cantidad de materiales utilizados para su confección. Por ejemplo en la calle Alcedo, entre la 14 y la 15, está ‘estacionado’ el batimóvil, que fue elaborado con plywood, PVC (plástico), cartón, tablas, llantas reales, luces tipo led y papel. Esta creación es una de las favoritas de los niños, pues pueden posar tras el volante junto al Caballero de la Noche y su archienemigo, el Guasón.

"Recuperamos la inversión y ganamos unos mil dólares, que repartimos entre todos los que hicimos el año viejo. Sí deja ganancias”.Ricardo Rojas, Monigotero

“Cuando termina todo, queda una ganancia de unos 300 dólares, pero más que por el dinero, se lo hace para que el público disfrute”, comenta Daniel González Reyes, el ‘mecánico’ del bólido.

Algunas familias, en vez de optar por un solo monigote de gran dimensión, han preferido recrear escenarios famosos, como la sala de la casa de los Simpson. Esta representación, aunque no forma parte oficial de la ruta, le permite obtener ganancias considerables a Alexandra León y a su madre, sus creadores. La obra de papel está compuesta por siete personajes: Homero, Marge, Maggie, Lisa, Bart, Puercoaraña y Ayudante de Santa.

Cuando concluya la exhibición, los gigantes serán desmontados, pues está prohibida por los peligros que conlleva su tamaño y por la contaminación.

“Trabajo con niños y siempre pienso en escenarios para ellos. Me tomó desde mediados de julio hacer a la familia completa. Le dedicaba unas horas después del trabajo y los fines de semana enteros. Mis monigotes, aunque son de tamaño normal, no los quemo ni los vendo, me los quedo como recuerdo”, dice Alexandra.

La familia Simpson forman parte de la exhibición. Su elaboración tardó cinco meses.Carlos Klinger / EXTRA

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