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¡Llora como la mujer más fuerte del mundo!
Neisi Dajomes es la representación del ñeque de la feminidad y es un ejemplo de fuerza, perseverancia, amor y gratitud a la familia
Las lágrimas de Neisi Dajomes no batieron el rímel que resaltaba sus largas pestañas. Un llanto que mojó los ojos y el alma de todos los ecuatorianos, y que seguro redefinirá la frase ‘llorar como una niña’. Llorar como la mujer más fuerte del mundo.
Hizo que el Ecuador gritara las palabras ‘niña’ y ‘mujer’ en otros contextos alejados de la realidad que viven en un país donde 6 de cada 10 mujeres sufren de violencia de género.
Ella mismo, luego de ser premiada con la medalla de oro en halterofilia, dijo que no importan las plataformas. En su interior, todas siguen siendo niñas y mujeres luchadoras.
Por ejemplo, las que se convierten en heroínas con medias de Los Simpsons o con zapatos cambiados rosados y amarillos. Niñas que levantan el mundo sobre sus hombros con un tocado multicolor que resalta la divinidad de su cabello afro.
Neisi, sobre el podio y llorando de la dicha, no solo nos regaló el oro, sino que nos recordó la importancia de la gratitud y el amor.
Neisi es todas las mujeres que ponen delante a su familia. Neisi nos dio algo más valioso que el oro, el ejemplo para miles de niñas, como tuiteó Lita Martínez, directora del Centro Ecuatoriano para la Promoción y Acción de la Mujer Guayaquil (Cepam).
Neisi Dajomes resaltó que hay deportistas, como la también halterista Alexandra Escobar, que merece muchos elogios por ser la única ecuatoriana en este deporte que ha participado en cinco Juegos Olímpicos, y subrayó que ella es su “ídolo”.
“No me encuentro aún, no sé en realidad el peso de lo que he alcanzado”, dijo ante la reflexión de que es la primera mujer en dar una presea dorada a Ecuador en una olimpiada.
Escobar, de 41 años, debutó en los Juegos de Atenas 2004, donde ocupó el séptimo puesto y recibió el diploma olímpico y, desde entonces, clasificó a los Olímpicos de Pekín 2008, en ellos fue quinta y recibió diploma; en Londres 2012 se ubicó novena y en Río de 2016 alcanzó su mejor posición, el cuarto puesto, por lo que recibió diploma olímpico, el cuarto de su carrera.