Exclusivo
Actualidad
Líderes barriales guayaquileños tienen madera de guerrero
Ciudadanos se ganaron el reconocimientos de sus vecinos por su labor social y acciones heroicas en beneficio del barrio. La ‘pipol’ los respeta
Poniendo en riesgo su vida, don ‘Da’ es un líder barrial en el conflictivo sector de Flor de Bastión. Aquí, donde otros temen hasta decir su nombre, Dario Zamora ha sabido conciliar con las bandas de la zona, en beneficio de los jóvenes.
(Lea también: Cierre de vías en Guayaquil: ¿por dónde no habrá paso durante este 9 de octubre?)
“Los perjudicados son los niño que no pueden hacer deporte. A ellos se les habla para que no anden juntándose con nadie. Con las bandas conciliamos, se conversa que ahí (la cancha) hay niños jugando, gente inocente, y ellos entienden. La clave ha sido mantenerse neutrales y no meterse en sus asuntos privados”, relató.
En el barrio, don ‘Da’ es respetado y los vecinos acuden a él para pedir auxilio en temas comunitarios. Mientras conversaba con diario EXTRA, no paraba de recibir saludos de vecinos y comerciantes.
“Tengo 58 años de edad y tengo más de 25 años ayudando a los muchachos. Empezamos con lo deportivo y ofreciendo colada con guineo para que se alimenten, ahora estamos con una fundación en la que le damos la comida a unos 120 niños”, detalló.
Señaló que siente orgullo al ver que algunos de los jóvenes que ayudó se convirtieron en ingenieros, abogados; también albañiles y electricistas, aunque también algunos, por las circunstancias y falta de empleo, se desviaron. De todo bota la mata”, expresó.
Tienen madera de guerrero
Otras personas se han ganado el reconocimiento de sus vecinos por acciones heroicas en beneficio del barrio. Bryan Rodríguez, conocido como ‘cangrejo’ en las calles Gómez Rendón y avenida del Ejército (centro), es un ejemplo de esto.
(También le puede interesar: El Papa Francisco revela el mayor secreto de la Virgen María: Impacto en el Vaticano)
El 20 de agosto de 2024, Cangrejo se enfrentó a un indigente que, drogado, subió a un techo, rompió tejas y empezó a lanzarlas a niños jugando, carros y casas. Al ver sus vecinos en riesgo, Bryan se armó de valor, subió por una escalera y después de pelear con suicida, que lo atacó con un trozo de techo afilado, pudo agarrarlo y junto a bomberos lograron bajarlo y acabar con el peligro.
Cuando Cangrejo bajó del techo, todos coreaban a todo pulmón: “¡Cangrejo!, ¡Cangrejo!”. ¡Era el nuevo héroe del barrio! “Tuve miedo, pero me llené de valor y pude salvar al muchacho. Él solo pedía que no lo golpearan y que llamaran a los militares,”, dijo ya a salvo.
¿Quieres leer más contenido de calidad? Suscríbete a Diario EXTRA