Si 14 de los 21 concejales de Quito votan a favor de la remoción del cargo de Jorge Yunda, este le diría ‘chaolín’ a la Alcaldía capitalina. Hoy es el día cero...

El proceso se inició luego de que el Colectivo Quito Unido y el Frente de Profesionales por la Dignidad de Quito presentaron formalmente los pedidos. Luego se hizo una convocatoria a la Comisión de Mesa, la cual dio paso a lo solicitado.

Esta vez se presentarán nueve elementos de cargo, entre los que se encuentran: incumplimiento de ordenanzas, uso indebido de recursos e incumplimiento de participación ciudadana.

“Es una suerte de juicio político, es decir, no tiene que ver con los delitos (peculado) que la Fiscalía investiga”, comentó Daniela Chacón, exconcejala. Yunda también es procesado por compra irregular de pruebas PCR.

Y el panorama es incierto. En redes sociales circula la convocatoria a dirigentes de barrios para defender a Yunda y los colectivos que impulsan la remoción han hecho lo propio.

Para Paco Moncayo, exalcalde de Quito, esta es una crisis de institucionalidad nunca antes vista en la capital y considera que los ediles tienen sobre sus espaldas el futuro de la ciudad. “Es hora de que se dejen de negociar entre partidos, lo que importa aquí es Quito. No puede seguir así”.

Sin embargo, considera que Yunda debió dar un paso al costado antes de llegar a estas instancias. 

Chacón comentó también que esta crisis institucional no es de esta administración. “Quito no tiene un modelo de gestión. Todos han querido cambiarlo y no se ha concretado”, explicó.

El proceso

El concejal Fernando Morales indicó que Yunda estará presente en la sesión convocada a las 08:30 para presentar sus alegatos. “Se escucharán a las dos partes y se tomará una decisión”.

De aprobarse la remoción, el alcalde tendrá tres días para solicitar al Tribunal Contencioso Electoral que revise si el proceso se ha llevado correctamente. “De ahí no hay más instancias”.

Enseguida, el legislativo del cabildo deberá nombrar al vicealcalde como el nuevo principal funcionario de Quito y entre los ediles elegir a alguien que ocupe este último puesto.

Para los ciudadanos esto representa un retroceso. “No es posible que tengamos un alcalde con tanta polémica. Nunca hemos visto eso”, dijo Fanny Cruz, moradora del sur de Quito.

“Esperemos que haya un precedente para que no sigan cometiendo actos de corrupción”, alegó Elizabeth Cumbicos, otro habitante.