Van en busca del llamado sueño americano, pero el solo viaje es ya un infierno. Mujeres y jóvenes migrantes, y a veces hasta hombres por igual, son víctimas de violaciones y abusos sexuales en la llamada ruta de Darién, en Panamá, que profundizan el drama y el dolor de decenas de familias que se atreven a cruzar por esa zona en su fin de llegar a Estados Unidos de Norteamérica.

Así lo revela un informe del relator especial de la Organización de Naciones Unidas (ONU) sobre los derechos humanos de los migrantes, Felipe González Morales, y un equipo de expertos, presentado a finales del año pasado.

El informe es totalmente revelador y advierte lo que nadie denuncia, pero todos saben: las mujeres migrantes que atraviesan el Tapón del Darién no solo se enfrentan a abusos sexuales durante el trayecto por la selva, sino que también lo sufren en las Estaciones de Recepción de Migrantes (ERM) del Gobierno de Panamá.

Según el reporte, el personal del Servicio Nacional de Migración (SNM) y del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) “habría solicitado intercambios sexuales a las mujeres y niñas alojadas en la ERM de San Vicente que carecen de dinero para afrontar los costes del transporte”.

Esto, porque muchas veces se quedan sin dinero porque deben pagar para que los dejen pasar por algunas zonas o porque son asaltados en el camino.

En el resumen, presentado el pasado 9 de diciembre 2022, se revela que según los informes sobre violencia en el Darién, en el año 2021 se registraron más de 300 casos de violencia sexual contra mujeres, niñas y personas pertenecientes a la comunidad LGBT, mientras que entre enero y junio de 2022 fueron más de 140 los casos de violencia sexual registrados.

Y si la persona migrante es afrodescendiente es peor, pues “se ven sometidas a violaciones, intimidaciones, amenazas y desapariciones por parte de agentes armados no estatales”, dice el documento.

Según los reportes, en el año 2021 más de 130.000 personas cruzaron a través de la selva, llegando a Panamá desde Colombia, y en el 2022 superaron las 240 mil, muchos de ellos ecuatorianos, en una cifra que nadie conoce bien, aunque se sabe que solo en lo que va de este año unos 9.500 compatriotas habrían viajado por el Darién.

Enviarán muestras de restos para identificarlos

El Ministerio Público de Panamá confirmó que debido al estado irreconocible de muchos cuerpos se gestiona con las entidades consulares de Ecuador y otras naciones el envío de demuestras de referencia (registros dactilares, cartas dentales, muestras genéticas) con la finalidad de identificar los cuerpos.

Esto, mientras el canciller de Ecuador, Juan Carlos Holguín, en el último reporte entregado la tarde del viernes actualizó la información sobre los ecuatorianos afectados por el accidente en el que viajaban 66 migrantes. Aseguró que las autoridades de Panamá enviaron un listado con los ecuatorianos que se transportaban en el bus. 

Tras la validación de datos con el Registro Civil de Ecuador, se constató que habían personas con ciudadanía ecuatoriana, pero eran individuos de otros países. Holguín, quien indicó que de los 22 ecuatorianos que viajaban, hay 11 que han sido identificados: cinco menores de edad y un adulto que están por ser dados de alta.