“Mataron, mataron a tu hijo, está tirado en el piso”, gritó la tarde de este viernes 31 de mayo, un vecino que desesperado tocó la puerta de la casa de Rubí Ortiz, ubicada en la cooperativa San Gregorio de Durán. Enseguida, la señora, de 32 años, salió de su inmueble, caminó dos cuadras y constató la tragedia que ahora la tiene sumida en el dolor.

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Henry, de 17 años, el mayor de sus cuatro hijos y el único varón, fue asesinado a tiros cuando regresaba de su colegio. Vestía el uniforme de la institución educativa, donde cursaba su último año de colegio. El hecho de sangre se registró en la cooperativa 28 de Agosto, en la primera etapa de la ciudadela El Recreo, en el cantón ferroviario.

De acuerdo con información de la Policía, el menor de edad se habría resistido al robo de su celular y por eso le descargaron siete tiros, los cuales acabaron con su vida.

“Era mi único hijo varón. Siempre me decía: ‘Mamá, cuando termine el colegio, voy al cuartel’, porque quiero ser militar. Su padre es albañil y en sus ratos libres, mi hijo lo acompañaba al trabajo. Se le llevaron el celular, que le regalé el 3 de abril, cuando cumplió 17 años. Le decía que no se lo llevara al colegio, porque era peligroso”, recordó llorando la progenitora.

La mañana de ayer, Rubí y su esposo y padre de sus hijos, Marcelo Burgos, acudieron al Laboratorio de Criminalística y Ciencias Forenses de Guayaquil para retirar el cadáver de su muchacho, velarlo y darle sepultura.

La madre, además, contó que en la mochila Henry guardaba documentos que este lunes 3 de junio debía entregar en una empresa donde iba a realizar sus prácticas escolares. “Estos papeles eran importantes, según cuentan, le habían quitado, pero él no se dejó arrebatar su mochila; mi hijito quedó tirado en el piso, agarrando su toallita con la que se secaba el sudor”, manifestó.

El padre del adolescente no tienen claro cómo exactamente se produjo el crimen de su hijo, ya que varias personas aseguran que estaba acompañado de otro ciudadano cuando lo mataron.

Durán es el segundo cantón después de Guayaquil, que registra más muertes violentas en el país. En lo que va del año, 210 personas han sido asesinadas solo en esta ciudad. Horas antes de este hecho, en la cooperativa Unidos Venceremos 2, fue asesinado a bala Denny Dylan Aguirre Quiñónez, de 25 años. Sus verdugos llegaron en una moto.

De acuerdo con versión de los familiares del occiso a los investigadores, el joven, presuntamente, se dedicaba al consumo de droga y habitaba en un territorio liderado por la organización criminal Los Chone Killers.

A las 06:00 de ayer, a orillas del río Guayas, en la ciudadela Primavera 1, fue encontrado amarrado de pies y manos Carlos Eduardo Bajaña Rodríguez, de 32 años, quien registraba antecedentes penales por robo, tenencia de armas y tráfico de droga.

“La víctima presentaba un orificio en la cabeza, similar a las producidas con un arma de fuego. Familiares indicaron que se dedicaba al consumo de droga y hace cuatro días salió de la cárcel y que lo vieron con vida por última vez a las 11:00 de este 31 mayo”, dijo el investigador. (AEB)

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