La mañana del lunes 19 de agosto, una familia guayaquileña fue secuestrada cuando llegaba a su empresa, ubicada en la vía a Daule. El general Víctor Zárate, comandante de la Policía Nacional, explicó que la pareja y su hija fueron interceptados por un grupo de motorizados que fingieron realizar un operativo policial.

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"Esta familia fue interceptada por cuatro sujetos a bordo de motocicletas con características similares a las que utiliza la Policía. Les dijeron que se trataba de un operativo y que el vehículo en el que se movilizaban estaba involucrado en un caso de secuestro", detalló el general Zárate.

Las víctimas fueron trasladadas al sector de Socio Vivienda, en el distrito Nueva Prosperina. Allí, los secuestradores bajaron a la madre y a la hija del carro, las subieron a otro vehículo y las llevaron a una vivienda ubicada en el bloque 6 de Flor de Bastión, donde las mantuvieron en cautiverio.

"Al padre de familia lo dejaron abandonado y luego se comunicaron con él por WhatsApp para exigirle un millón de dólares a cambio de liberar a sus familiares", añadió el comandante de la Policía.

Finalmente, tras conocer del secuestro, agentes de la Unidad Antisecuestro y Extorsión (Unase) realizaron un operativo que permitió capturar a los responsables. 

Siete personas fueron detenidas, entre ellas un oficial de la Policía con el grado de subteniente, dos cabos y otros cuatro ciudadanos. Todos fueron puestos a disposición de las autoridades judiciales, y se presume que los detenidos tienen vínculos con la organización criminal Los Tiguerones.

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