Los primeros 15 días de 2025 han sido difíciles para los residentes de varios sectores, no solo debido a la creciente inseguridad en Guayaquil, sino también por los impuestos. Los principales responsables de esta controversia son el Impuesto Predial Urbano y la Contribución Especial de Mejoras, siendo este último el que ha generado mayor malestar.

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Este impuesto, que se suma al ya existente Impuesto Predial, ha sido duramente criticado por propietarios y arrendatarios debido a su impacto económico directo. La tensión es evidente tanto en redes sociales como en las largas filas frente al Palacio Municipal, donde cientos de personas esperan ser atendidas para resolver sus inquietudes o realizar los pagos.

En X, por ejemplo, se comparte una carta pública del usuario @carlitoswayecal dirigida al alcalde Aquiles Álvarez, en la que manifiesta su indignación y frustración respecto al CEM. “Este impuesto se justificaría si esta contribución se viera reflejada en obras en mi sector (Kennedy Norte). Sin embargo, a lo largo de estos siete años, he observado con preocupación que dichas promesas no se han materializado de manera efectiva”, señala.

En la publicación, que ha superado las 76,1 mil visualizaciones y ha generado el apoyo de numerosos internautas, el usuario explica que paga $200 en Impuesto Predial y que el CEM asciende a $300. “Resulta insostenible y abusivo”, recalca el usuario, quien además destaca que es una persona con discapacidad y enfrenta dificultades debido a la falta de accesibilidad adecuada en su entorno.

El usuario exige respuestas y acciones concretas por parte de los concejales y el alcalde para aliviar esta situación. Sin embargo, no es el único. Marlene Soriano, residente de la ciudadela Miraflores, en el norte, admite que aún debe el CEM del 2024, ya que lo considera “injusto” y prevé seguir en la misma postura en 2025. “Mi impuesto predial sale a 57 dólares y la contribución especial de mejoras es de 104 dólares. ¿Ya vio qué hicieron aquí? Repavimentaron una calle que estaba buena, no tenía ni baches, y así le pusieron asfalto”, afirma.

Idilia Espín, residente de Samanes 4, también en el norte, critica irónicamente que su sector no ha visto mejoras en los últimos 30 años y se opone a la contribución especial. “En el predial me sale cancelar 60 dólares, mientras que por el CEM son 66 dólares. Recién me doy cuenta de que pagamos una contribución especial desde el 2015 y el año pasado no pagué”.

En el sur de la ciudad también hay descontento, pues los habitantes argumentan que no han visto obras significativas en sus barrios en los últimos años, por lo que también prefieren solo pagar el Impuesto Predial Urbano.

La ciudadanía exige respuestas al Municipio de Guayaquil.

Ivonne Pinzón, líder de la ciudadela 9 de Octubre, ha hablado con sus vecinos y ha notado que la contribución de mejoras varía entre los residentes, lo que ha generado una avalancha de cuestionamientos. “Sería bueno que nos respondan sobre qué mejoras estamos pagando. Queremos explicaciones sobre cuáles fueron las mejoras que se hicieron en la ciudadela 9 de Octubre”, expresa Pinzón, al indicar que algunos moradores deben pagar desde 33 hasta más de 80 dólares.

Moisés Vargas, de La Garzota, señala que esta situación le ha pedido un “recálculo” de los montos, ya que “el CEM es más alto que el predial”, y lamenta no ver "una sola obra en su manzana". “Creo que la gente debe salir a protestar y anular legalmente esto”, opina.

EXTRA realizó un recorrido fuera del Palacio Municipal y observó que algunos ciudadanos prefieren pagar el predial urbano, mientras que otros optan por el CEM. Como es habitual, los ciudadanos se acercan a la institución para realizar el trámite de manera presencial, a pesar de que existen canales digitales disponibles. Entre las escenas registradas por este Diario el lunes 13 de enero, se destacaron las vallas metálicas que cercaban el Palacio, agentes metropolitanos con armas, y una mujer pidiendo que "no haya nadie entre los pasillos y que hagan la cola".

Concejal Emily Vera da detalles sobre los impuestos

La concejal Emily Vera ha liderado la discusión sobre los impuestos. En una entrevista con EXTRA, explicó que el CEM no es un tributo nuevo, ya que está regulado por una ordenanza de 1996, y el primer cobro se realizó en 2015, para cubrir el período de 2000 a 2014. Luego, destacó que estaba previsto cobrar por el período 2015-2022 en 2023, pero la administración anterior, bajo Cynthia Viteri, no lo cobró.

“Lo que recauda el Municipio es un mínimo valor de reinversión a recaudar de 140 millones de dólares, que está dividido para siete años. Es decir, cada año se recaudan alrededor de 20 millones de dólares, y ese dinero que regresa a las arcas municipales no puede ser tocado para gasto corriente” indica.

También se refiere al argumento de muchos ciudadanos acerca de que, “no han visto” las obras en sus comunidades. “Muchas veces la gente dice ‘la obra no ha llegado’ porque estamos acostumbrados a que debe ser en nuestra peatonal, al pie de nuestra casa, pero puede ser en el radio de influencia”. Además, explicó que el avalúo del CEM se basa tanto en la propiedad como en las obras realizadas en la zona.

Vera también subrayó que, de los que pagan la contribución especial de mejoras, el 72% de los guayaquileños abonan entre 1 centavo y 20 dólares. En cuanto al 30% restante, dijo que los montos son superiores a los 20 dólares.

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