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Esmeraldeña ruega que una pinza no le friegue la vida
Instrumento fue olvidado dentro de una joven tras una cesárea. Después de seis meses, con una radiografía los médicos hicieron el hallazgo.
Los familiares de María, de 20 años, están a la expectativa de su salud luego de una delicada operación que le hicieron para sacarle una pinza quirúrgica. Durante seis meses, ella la llevó en su vientre tras haber sido sometida a una cesárea, en el hospital Delfina Torres del sur de Esmeraldas.
Ayer una parienta detalló a EXTRA que la chica llora todos los días porque desconoce qué le pasará después de ser víctima de esta supuesta negligencia médica. “Los doctores no le dicen nada. Además, debemos comprar por nuestra cuenta los medicamentos porque en el hospital no los tienen”, agregó la allegada.
Contó que todo este problema se originó el 14 de marzo pasado, día que María fue trasladada desde su domicilio en Súa, Atacames, a la casa de salud de la capital esmeraldeña, para que atendieran el parto de su primer hijo.
Después de revisarla, los galenos determinaron que debían abrirle el vientre para que el bebé naciera. Al parecer, no hubo complicaciones durante la cesárea, por lo que la herida fue suturada.
Luego de dos días, la madre de familia fue dada de alta. Ella volvió a casa con su hijo en brazos.
El recién nacido tuvo un quebranto en su salud tras 21 días. Fue llevado nuevamente al hospital Delfina Torres el 4 de abril, para que lo chequearan.
Francisco Casco, director médico de esta casa asistencial, explicó a un medio de comunicación local que la condición del niño era bastante grave. “Los parientes indicaron que la criatura tuvo un cambio de color, algo que se conoce como ictericia”, precisó el galeno.
Cuando lo vieron, se determinó que tenía que ser ingresado al área de Neonatología.
Pero al cabo de 48 horas el bebé falleció, aparentemente por una cardiopatía congénita, según el diagnóstico entregado a la familia del menor. “Los médicos no nos dijeron que tenía complicaciones en su corazón”, dijo la allegada.
Con la tristeza a cuestas por la muerte del bebé, María volvió a su casa, en Súa. A inicios de este mes, ella sintió fuertes dolores en su vientre y dedujo que debían ser provocados por la cesárea realizada.
Sin embargo, la situación empeoró. Fue así que la llevaron al hospital de Atacames, donde le hicieron una radiografía que reveló algo impactante: dentro del vientre había una pinza de aro, de aproximadamente 18 centímetros. Esta se usa para sostener material quirúrgico durante las cirugías.
Otra operación
Detectado el problema, María fue derivada nuevamente al hospital Delfina Torres. La familiar de la joven contó que le hicieron una segunda cirugía para sacarle el objeto.
“Este cuerpo extraño se encontraba en una cavidad que se llama peritonio. Luego de la operación, la paciente se encuentra estable”, indicó Casco.
Entretanto, se puso la denuncia en Fiscalía para que se identifique al responsable de dejar aquel instrumento dentro de María. “Pero ni siquiera sabemos cuándo se harán las investigaciones”, lamentó la familiar.
En una entrevista a un canal de esa ciudad, Raquel Nazareno, gerente del hospital Delfina Torres, dijo que se efectuará una auditoría médica interna. “Esto nos va a determinar quiénes fueron los responsables, los pasos que se siguieron en la cirugía y si se cumplieron o no los protocolos”.
La familiar de María exigió que se encuentre a los responsables de lo ocurrido. “La joven no tiene para costear los gastos médicos. A este problema se suma que el marido no tiene trabajo”, apostilló la mujer.