Xander K9 se enfrenta al peligro con cada recorrido en la capital. Sus rutas son zonas de alto riesgo y para el mal terrenal dice estar preparado, pero también para enfrentar lo paranormal.

Este influencer capitalino cuenta a EXTRA que ha tenido encuentros con situaciones que desafían sus creencias. La más reciente se produjo hace aproximadamente un mes, cuando visitaba la tumba de su abuelita en el cementerio de San Diego, centro de Quito.

“En ese momento decidí hacer un video y caminé por el área donde entierran a niños. Había una rosa de los vientos de papel y empezó a moverse. Ni siquiera había viento para que eso sucediera”, cuenta con admiración.

Al tiempo, se escucharon los murmullos de unos niños. Xander se estremeció, pero siguió con su filmación. Aunque más tarde sí tuvo un leve ‘bajón’ de ánimo.

En noviembre del año pasado, algo similar le ocurrió durante otra filmación, en una casa abandonada que está por la avenida Simón Bolívar, paralela al túnel Oswaldo Guayasamín.

“Entrar ahí fue bastante complicado. Cuando conversé con gente de un barrio cercano, dijeron que se veían cosas extrañas, como si hubiera entes sobre la casa”.

Al adentrarse hasta el predio, el ambiente se tornó pesado y cuando recorría esos recovecos abandonados, una voz espeluznante le susurró algo: “¿A dónde vas?”.

El recorrido acabó y Xander se dio cuenta de que su amuleto para enfrentar justamente estas situaciones tenía una rajadura. El influencer está protegido por una medalla de san Benito que se mandó a hacer tiempo atrás.

Pero el momento más estremecedor, y que está evidenciado, fue hace un año cuando realizaba un video en su local comercial del sur de Quito. Xander explicaba los componentes que debe tener un casco para conducir de forma segura una motocicleta.

“Tomé el casco y lo coloqué sobre una repisa. La verdad no me percaté de lo sucedido hasta cuando edité el video”. En la imagen se observa cómo el casco se mueve de su posición original. Y no se debió a que estuviera mal ubicado.

Para Christian Cevallos, investigador de fenómenos paranormales, en el video que muestra este momento no hay nada que evidencie algún truco.

“Sí, es real. Ahora hay que saber qué tipo de sensaciones hay en el lugar, qué ha pasado ahí. De pronto, alguien que usó ese casco murió, o en el lugar donde este señor vive, pero el movimiento sí se ve real. No hay opción a fraude en ese tipo de imagen”.

Con respecto a los susurros, tomando en cuenta los sitios donde ocurrieron, Cevallos considera que algún espíritu debió seguirlo.

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