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Vega junto a su madre.Anny Bazán / Extra

“Por mi mente pasó la idea de matarme”

Su madre, sus hijos y demostrar que era inocente fueron el aliciente para no suicidarse. En prisión se encontró a personas que conoció en sus presentaciones.

Hasta las 13:00 de ayer habían transcurrido 23 horas desde que Cristian Paúl Vega García, conocido como el compadre Siete Vidas, dejó la prisión, pero él únicamente había dormido 120 minutos. Su miedo a conciliar el sueño se volvió una pesadilla.

El actor confesó a EXTRA que aún no asimila que es un hombre libre, por lo que la noche del miércoles y la madrugada de ayer evitó dormir y prefirió permanecer conversando con sus familiares y amigos.

Temía que, al despertar, su cómoda habitación fuera la celda donde permaneció recluido 299 días.

Sentado en el sofá de su casa, su madre Mariela Vega lo abrazaba y le tomaba las manos. A ratos, ambos lloraban. Lloraban de felicidad, por la alegría de la libertad, de estar juntos de nuevo.

Allí, frente a su progenitora, Cristian reveló que el más terrible deseo que cruzó por su cabeza mientras estuvo en prisión fue quitarse la vida.

La desesperación lo llevó a pensar que ese era el mejor camino. “Pero cuando creía desfallecer, a mi mente volvía el afán de demostrar mi inocencia, de volver a ver y abrazar fuera de la cárcel a mi madre y a mis tres hijos. Ellos me devolvían la esperanza para seguir luchando”, manifestó el actor de la serie ‘Mi recinto’.

En la cárcel no hay amigos, se dice. Sin embargo, dentro del centro penitenciario volvió a ver a personas a las cuales conoció en sus presentaciones como actor.

Un involuntario movimientos de cejas lo hizo ver como el personaje que lo llevó a la fama, el compadre Siete Vidas. Se le ha pegado, ya es parte de él.

Pero Vega García siguió contando su verdad, algo matizada por el cansancio de un hombre que luce muchísimo más delgado que hace 10 meses. Ha bajado 40 libras, por la tensión y los problemas.

Cristian comentó que durante el tiempo que permaneció detenido, la manera que tuvo para sentirse libre fue dictar clases de actuación a sus compañeros de prisión. Esa actividad la realizó desde la segunda semana en que fue llevado al Centro de Rehabilitación Social de Varones, el 9 de septiembre del año pasado.

El tiempo tras las rejas también le sirvió para crear dos proyectos de televisión, los cuales, según él, estarán al aire en dos meses. “Uno es una comedia familiar y el otro un programa para adultos”, explicó.

Manifestó que no había día en que no recreara en su mente lo que pasó. “Confieso que me siento arrepentido por haber llevado a un desconocido a mi departamento, pero nunca imaginé que en mi casa, en un tercer piso, se iba a perpetrar un ajuste de cuentas. Si pudiera retroceder el tiempo, ese día habría preferido pasar con mis hijos”, dijo Cristian.

La Selfie

Para demostrar lo que ocurría en su casa

Según el artista, en la foto que tomó dentro de su departamento nunca hubo una mala intención, la realizó para demostrarle a su excuñado que había ocurrido un crimen. Esto sucedió el 9 de setiembre de 2017 en el edificio Bryan, ubicado en las calles Sibambe y Abdón Calderón, de la ciudadela Democrática Norte, en Durán. La víctima, Rosendo Alfonso Almeida Mora, fue asesinada a balazos.

“Horas antes había invitado a mi excuñado para que compartiera con nosotros, pero nunca fue. Luego lo llamé y le comuniqué que habían matado a la persona que estaba conmigo. Él pensó que era una broma, por eso tomé la selfie y se la envié para demostrarle que era cierto. Incluso, también hice fotos cuando la policía llegó a la escena”, mencionó Vega.

El actor fue declarado inocente a las 21:00 del martes y a las 16:00 del miércoles salió del Centro de Rehabilitación Social.

Pilas con esto

Perdió peso

Cristian indicó que durante los casi 10 meses en que estuvo detenido perdió 40 libras.

Seis hermanos

El actor es el cuarto de seis hermanos. Su mamá lo llama Nano, de cariño.