Apesar de que el Halloween se celebra el 31 de octubre, sobre todo las últimas semanas de este mes, hay un sinnúmero de eventos en los que muchos aprovechan para lucir un disfraz.

De acuerdo a la sexóloga Paola Pérez, esta es una buena oportunidad para que las parejas incluyan trajes diferentes durante el sexo.

Explicó, durante el programa El placer de los lunes que se transmite por el Facebook Live de Diario EXTRA, que incluir disfraces en la cama ayuda en múltiples factores, sobre todo en parejas que llevan muchos años juntas y quieren variar.

Uno de los mayores obstáculos para esta práctica es la vergüenza, pero si es de las personas que acostumbra a disfrazarte en Halloween puede aprovechar para lucir algo que le guste a su pareja o sorprenderla.

Entre los beneficios que conlleva esta práctica está el juego de roles. “Disfrazarse y asumir un papel puede ayudarle a los amantes a salir la zona de confort, la rutina, y disfrutar del sexo con una visión diferente”, comentó Pérez.

De hecho, el cambio de roles es un juego sexual apetecido entre quienes tienen la mente abierta. Cuando esta práctica se asume en su totalidad, el hombre adopta un papel de sumisión y es la mujer quien lleva a cabo la acción, penetrando analmente a su pareja mediante un dildo.

Sin embargo, para Pérez, como en nuestra sociedad el sexo es visto de manera más convencional, es difícil que se dé esta práctica.

No obstante, jugar con disfraces, como por ejemplo, una mujer vestida de policía y el hombre como alguien a quien reprende, puede servir para que una mujer adopte una postura de mando durante el sexo.

“Usualmente, ellas son más pasivas en la cama y ellos, los que llevan las riendas, aunque no debería ser así. Estar en ese estado puede ayudar a que una persona se ponga en el lugar de otra”, comentó.

La sexóloga recalcó que el disfraz no es exclusivamente para la mujer, que tanto él como ella pueden optar por usar un traje que los haga lucir más sexis.

¿En qué ayuda?

1.Una de las principales razones por las cuales las parejas terminan aburriéndose de tener sexo es porque hacen siempre lo mismo. Por ello, es fundamental innovar de vez en cuando y un disfraz puede ayudar.

2. Las obligaciones laborales, los hijos o los estudios pueden hacer que el estrés suba. Un disfraz no solo que puede sacarte de la rutina, sino que, además, es un accesorio que ayudará a liberar un poco de ese estrés. Divertirte con tu pareja mientras juegas a ser un personaje liberará endorfinas.

3. La confianza nunca puede faltar en una pareja. Utilizar disfraces en la intimidad es una práctica recomendada, porque ayuda a estrechar estos lazos a través de la diversión y excitación que provoca. Superar la vergüenza y los temores juntos fortalecerán la relación y lograrán la complicidad que los vuelva más unidos.

4. Todos tienen fantasías sexuales o eróticas, y un buen plan para cumplirlas es usando trajes. Además de la ropa específica, se pueden usar frases o expresiones excitantes.