Cinco personas que, al parecer, integraban una organización criminal de alta peligrosidad, según informó la Policía, fueron arrestadas la madrugada de hoy. Los sospechosos fueron capturados mientras 'ruqueaban' en sus casas. Entre ellos se encontraban dos presuntos líderes de la banda y el supuesto gatillero.

Para atrapar a este último fue necesario un arsenal de agentes. Una docena de miembros del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) rodeó su domicilio ubicado en la Lucha de los Pobres, en el sur de Quito.

Tumbaron puertas y ventanas para acceder al dormitorio donde permanecía escondido. Incluso, los perros del sospechoso casi muerden a los uniformados mientras ellos lo buscaban por la casa. Según la Policía, este sujeto sería el responsable de algunos crímenes cometidos en la capital y en las provincias aledañas.

El último caso por el que lo investigan es por tentativa de asesinato. El general Alain Luna, director de Investigación de la Policía dijo que el hombre supuestamente tenía la misión de liquidar al entonces director de tecnologías de información y comunicación de la Agencia Nacional de Tránsito (ANT). Él habría disparado por tres ocasiones mientras el funcionario circulaba en su auto.

El hecho fue denunciado públicamente el pasado 2 de agosto. Además, se compartió en redes sociales la fotografía de la ventana del vehículo con los agujeros de bala. Dentro de la casa del implicado, los agentes encontraron un revólver de fabricación nacional.

El coronel Rolando Jácome, jefe de la Sidpro-BAC, señaló que el arma será indagada dentro de la instrucción fiscal para comprobar si ha sido utilizada en algún crimen por el que es investigado el sospechoso.

“Cuatro meses hemos seguido la pista de esta banda”, afirmo.

Otros detenidos

Mientras el presunto gatillero era entrevistado por los agentes, otros allanamientos se realizaron en el norte de la ciudad. En La Roldós detuvieron a alias La China y a alias El Gordo, una pareja que supuestamente figuraba como altos mandos dentro de la banda.

Ellos, según Jácome, respondían a las órdenes de un sujeto que sería el cabecilla de la organización. Este se encuentra recluido en la prisión de Latacunga por asociación ilícita y tentativa de asesinato.

El recluso se habría aliado a la banda de Los Lobos mientras cumplía sus primeros meses de cana y, por consiguiente, sus compinches se convirtieron en el brazo armado de esta organización narcocriminal.

En Calderón también capturaron a otros dos supuestos miembros de esta red. Se dedicaban al robo de vehículos, de domicilios y de entidades financieras. Ellos y el detenido en La Roldós (alias El Gordo) son parientes.

Como parte de las evidencias del caso, la Policía incautó cinco mil dólares, un automóvil, partes de carros, joyas, equipos electrónicos...

Los objetos robados eran revendidos en redes sociales. El general Luna añadió que en lo que va del año se han desarticulado 602 grupos delincuenciales a nivel nacional y se han decomisado 1.890 armas de fuego.