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El destino de la boa que apareció y se pasó por el centro de Guayaquil
El reptil, al parecer, salió de una alcantarilla. Varios ciudadanos le hicieron fotos y videos
Cuando Mariana Martínez se enteró de que el alboroto que hacían un grupo de personas, quienes estaban paradas sobre la calle 9 de Octubre y José de Antepara, en pleno centro de Guayaquil, era porque una culebra se arrastraba entre las baldosas de esta zona, lo primero que hizo fue subirse a unas banquetas.
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La adulta mayor, a las 08:30 de ayer, acudió a ese sector de la ciudad para acompañar a su nieta a dejar unos documentos. Temía ser mordida por la serpiente de la especie Boa Imperator, que ayer puso a más de un ciudadano con los ‘pelos de punta’, y a los más ‘valientes’ a tomarles fotos o registrarla en video.
“A pesar de mis años, nunca en mi vida he visto una serpiente de cerca; les tengo pavor. Cuando me dijeron que era una víbora, recogí mis piernas. Lo raro es que haya aparecido en pleno centro, quizá salió de una alcantarilla”, contó.
Eva Erazo tampoco pudo resistirse al temor de una picadura. Apenas vio la serpiente, salió corriendo, cruzó la calle y se puso a buen recaudo.
Blanca Guamán, quien trabaja vendiendo caramelos, cigarrillos y periódicos en esa zona de ciudad, “pecó de valiente”. No solo se acercó a ver si el alboroto era por el hallazgo de una serpiente; además, sacó su celular y le hizo fotos y videos.
“No se veía agresiva, antes como que se arrastraba de manera muy lenta, bien estaba embarazada o un carro la había lastimado”, sostuvo.
Para Patricio León, el hallazgo de una serpiente no es mayor novedad, pues asegura que en el sector que reside, en la ciudadela Bellavista, más de una vez se ha encontrado con la presencia de estos reptiles y que, incluso, ha matado un par.
Por su parte, el Municipio de Guayaquil informó que la serpiente fue trasladada al bosque Cerro Blanco, junto a la vía a la costa y que personal de la Dirección de Bienestar Animal coordinó acciones con policías de la Unidad de Protección del Medio Ambiente para llevar a la boa a un espacio seguro y ponerla en buen recaudo.
“Esta boa es un animal nativo de la Costa ecuatoriana, no es venenosa, por lo que no representa un riesgo para la ciudadanía. Autoridades policiales presumen que la serpiente emergió a la calle procedente de las alcantarillas”, indica el documento emitido por el Cabildo porteño.
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