El brutal crimen de una mujer, de 24 años, en Ibarra, Imbabura, se investigará durante 30 días, según Fiscalía. Durante este tiempo, el principal sospechoso estará en prisión preventiva, luego de confesar a la Policía ser el autor de este asesinato.

La víctima se dedicaba a brindar servicios sexuales a domicilio, declaró su esposo a los investigadores. Y justamente cuando acudió hasta el domicilio de un cliente, este la asesinó y despedazó su cuerpo.

El caso se reportó como una desaparición por parte del marido de la asesinada. El hombre les dijo que había dejado a su pareja en el domicilio del implicado para el encuentro sexual pactado. Pero después de eso, perdió el contacto con ella, durante el 30 de mayo de este año.

Al siguiente día, los policías abrieron el caso como una desaparición y comenzaron a indagar. Se basaron en un depósito que recibió la trabajadora sexual por parte del sospechoso y llegaron hasta el inmueble, ubicado en el barrio El Vergel de Ibarra.

El tipo, tras ser capturado, confesó que colaboraría con la Policía. Fue así que les contó que había descuartizado a la joven. Afirmó que la pierna derecha de la víctima fue arrojada a un contenedor de basura, la cual fue localizada en un centro de procesamiento de desechos llamado Socapamba.

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El resto del cuerpo de la joven descuartizada en Ibarra

Asimismo, el tipo les contó a los agentes que el torso (con un brazo todavía adherido) fue abandonado dentro de un contenedor de desechos, el cual estaba cerca de su casa. Lo mismo hizo con la cabeza de la joven trabajadora sexual.

Una fuente le confirmó a EXTRA que el torso fue localizado en Socapamba, durante este 1 de junio, fecha en la que se halló, en primera instancia, la pierna derecha de la trabajadora sexual. El implicado les dijo a la Policía que, tras el terrible crimen, arrojó la otra pierna cerca del río Tahuando. Cuando los agentes fueron hasta el sitio señalado por el sujeto, encontraron la extremidad envuelta en una funda negra.

Sin embargo, no se ha tenido noticias oficiales del paradero de la cabeza de la víctima. Por ahora, el caso fue catalogado como un asesinato, mas no como un femicidio. Además, aparte de este hecho, en medios locales se difundió que otra mujer habría sido también asesinada de forma brutal, pero en Cotacachi (Imbabura): su cuerpo apareció dentro de una casa con aparentes signos de tortura.

De este último suceso no se tienen mayores detalles oficiales. Por ahora, no se han reportado personas detenidas que respondan legalmente ante este suceso perpetrado en el centro del cantón imbabureño.

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