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Se colgó y nadie sabe los motivos de su decisión
Aprovechó confinamiento para suicidarse dentro de una finca de El Oro
Cuando todos estábamos confinados por el toque de queda, Jeison David Paladines Maza decidió salir de su casa rumbo a la finca donde laboraba. Allí, en un pasillo que conduce a una bodega de insumos agrícolas, amarró una cuerda a una viga y el otro extremo a su cuello y se fue de este mundo.
El presunto suicidio ocurrió a eso de las 23:30 del domingo 25 de abril, en el sector El Caucho, cantón Balsas, provincia de El Oro.
Su esposa Nicol Ramos Paladines contó que Jeison salió de su casa a las 21:30, argumentando que iría a la finca, que queda ubicada a poca distancia de la vivienda.
En diálogo con la policía, la mujer agregó que últimamente notaba raro a su conviviente. “Al ver que se demoraba y no contestaba, acudí a buscarlo y lo encuentro colgado”, dijo Nicol a los agentes que realizaron el levantamiento del cadáver.
Ramos gritó por ayuda y en ese momento llegaron trabajadores de la finca, quienes cortaron la cuerda y trataron de reanimar a la joven víctima.
Con la esperanza de que aún se encuentre con vida, llamaron al ECU-911. Se coordinó una ambulancia, pero los paramédicos al llegar solo confirmaron el deceso del jornalero.
Agentes de la Dirección de Muertes Violentas (Dinased) recién acudieron en la madrugada de ayer, debido a que el sitio es parte de un sector rural de difícil acceso. “Pudimos observar una soga colgando sobre un riel del techo, el cuerpo presentaba surco completo en el cuello”, indica el informe de la Dinased.
Luis Alfredo Paladines, hermano del fallecido, explicó que su hermano aparentemente estaba muy bien, lo veían feliz, jamás les comentó que tenía algún problema.
Jorge Loayza, dueño de la hacienda, señaló que por una llamada de Nicol Ramos acudió a la finca para ayudar a bajar a su esposo que se encontraba colgado. Él también le explicó a la policía que no conocía de problemas o deudas que haya tenido el ahora occiso.