Exclusivo
Actualidad
Cinco espeluznantes descuartizamientos que conmocionaron al Ecuador
Repasamos los cinco últimos asesinatos de esta clase que convulsionaron a Ecuador y que se dieron por líos de drogas hasta rituales satánicos
El pasado 3 de agosto, el mundo se conmocionó con la noticia del asesinato y descuartizamiento del reconocido cirujano plástico colombiano Edwin Arrieta a manos del chef español Daniel Sancho, quien confesó y hasta facilitó un dibujo detallando cómo cortó al médico en 17 partes, antes de desecharlas por toda la isla de Koh Phangan, en Tailandia.
Este caso ha reavivado la memoria ciudadana sobre otros sucesos similares ocurridos en el Ecuador. En este resumen, les presentamos un recuento de cinco de los casos más impactantes de los últimos 15 años, todos fueron cubiertos e informados por EXTRA.
(Te puede interesar: Guayaquil: Hombre muere baleado al interior de un bus en Mapasingue Oeste)
CORTADA POR SU PRIMO
El 13 de junio de 2010, Carmen Patricia Bistín, estudiante de la Universidad Central, de 25 años, desapareció de su domicilio en la parroquia San Antonio de Pichincha, en el norte de Quito. Luego de las investigaciones, su primo Gabriel Macías Cadena y Andrés Lombeida Rosero, alias Chupacabras, fueron detenidos como los autores del cruento asesinato.
Macías confesó que él y Chupacabras mataron y descuartizaron a la joven para posteriormente arrojar la cabeza, tronco y brazos en el parque Itchimbía y las piernas en un terreno de San Antonio de Pichincha. La motivación habría sido de carácter sexual.
Los apuñalaban y descuartizaban en rituales en nombre de Satanás
A finales de 2011, siete miembros de la banda de los Uñas Negras fueron capturados por asesinar y descuartizar a dos personas, una de ellas menor de edad (17), en el sector de Nueva Prosperina, noroeste de Guayaquil.
Los Uñas Negras revelaron que buscaban limpiar su zona de personas malas y por eso es que mataron al adolescente, que les habría sugerido atacar a una pareja de ancianos, creyentes en Dios. Se tuvo que excavar el terreno donde se asentaba una de las covachas usadas para sus rituales para hallar los cadáveres. En el ritual satánico encendían velas negras, luego apuñalaban y descuartizaban a sus víctimas. Los aprehendidos fueron sentenciados a 25 años de prisión.
UNA SUPUESTA PROPUESTA INDECENTE
El 23 de enero de 2013, el cuerpo de José Moreira Tuárez (58 años) fue hallado descuartizado y enterrado en el patio de una vivienda en la parroquia Picoazá, Portoviejo. La familia había denunciado su desaparición y la Policía determinó que el último en verlo con vida fue Cristian Zambrano Soledispa (26 años), el 16 de diciembre de 2012.
Zambrano confesó que Moreira le hizo propuestas indecentes y como se negó, se dio una discusión que terminó en el asesinato. Relató que su intención era vender la carne como res, pero se arrepintió y lo enterró en su casa. Utilizó un martillo para matar a la víctima, y una sierrilla para cortarla en pedazos.
TODO POR UN LÍO DE DROGAS
A John Barcia Camejo, un transexual de 19 años, también conocido como Taty, lo vieron por última vez ingresando a la casa de un microtraficante, el domingo 12 de abril de 2015. Un día más tarde, su cuerpo, cortado en pedazos, fue hallado en varias bolsas en la cooperativa Enner Parrales, al noroeste de Guayaquil.
Un familiar relató que Taty le había pedido que le acompañe y espere frente de la casa del vendedor de droga, con quien iba a hablar un tema de “heroína y perica (cocaína)”, pero no se supo más de ella.
La investigación determinó que ‘Taty’ fue asesinada con dos puñaladas y luego decapitada y descuartizada. Tres días después, la vivienda fue allanada y un sospechoso capturado. En el lugar se halló sangre y un arma, supuestamente usada en el crimen. La cabeza de ‘Taty’ no apareció.
GUARDÓ LOS RESTOS EN EL CONGELADOR
El 25 de junio de 2019, el cuerpo de Evelyn Espinoza, una joven de 24 años con discapacidad intelectual, fue hallado dividido en ocho partes, almacenadas en un congelador en la vivienda de Alexander Javier Contento (26), quien era su pareja sentimental.
Este admitió que tuvo las partes congeladas durante 19 días, hasta que la familia de la víctima denunció su desaparición, lo que lo hizo asustar, por lo que las metió en hieleras y las abandonó en el sector de Florida 4, al sur de Machala.
Tras su captura, el asesino pretendió aquejar problemas mentales; sin embargo, un examen psicológico los descartó y finalmente fue sentenciado a 34 años y ocho meses de prisión. El cuerpo de Evelyn nunca se completó y fue enterrada sin los pies y una mano.
¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡Suscríbete aquí!