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En una calle de La Argelia, en el sur de Quito, los vecinos son acechados por delincuentes
Una banda delictiva estaría intimidando a los habitantes de la avenida Río Prieto. Los moradores han instalado alarmas y dicen que si agarran a un ‘choro’ le darán duro.
Lidia Quishpe colocó las rejas de protección de su tienda más adelante luego de que una banda de choros acechara a sus clientes.
La moradora vive en la calle Río Prieto, en La Argelia, sur de Quito, y hace una semana vio cómo encañonaron con una pistola a un joven.
Según ella, un sujeto se bajó de un auto blanco y se hizo pasar como cliente. Le pidió una gaseosa. Mientras Quishpe se fue a traer el producto, otro tipo se bajó del carro con una pistola y, junto a su compinche, acorralaron a otros moradores que compraban en el lugar.
Al ver eso, la mujer le lanzó la botella a uno de los pillos y su empleada activó la alarma. Los delincuentes huyeron.
Una calle peligrosa
Quishpe fue con el video que registró una cámara de seguridad a la Policía para denunciar, pero, según ella, le dijeron que no se puede hacer nada “porque no hubo robo ni personas heridas”. Diario EXTRA se contactó con el Distrito Eloy Alfaro e indicaron que se acercarán a la persona afectada para conocer del caso y brindarle más seguridad.
Olimpia Tipán, dirigente del barrio, comentó que por eso no confían en las autoridades.
La vecina explicó que la calle Río Prieto se ha convertido en una zona estratégica para los delincuentes. Esta arteria vial cubre una distancia de 650 metros y separa a los sectores de La Argelia y La Lucha de los Pobres. A los costados del trayecto adoquinado hay bosques y terrenos abandonados.
Estos lugares, según Tipán, son aprovechados por los delincuentes para esconderse o ‘tapiñar’ sus armas. “También suelen usarlos para consumir estupefacientes”. La dirigente resaltó que por esta calle se pueden fugar con mayor rapidez hacia las avenidas Simón Bolívar o Maldonado.
Acolite entre ‘vecis’
Moradores que viven en esta cuadra implementaron una acción para contrarrestar la inseguridad. Quishpe y los ‘vecis’ que viven cerca de ella colocaron alarmas en sus casas y quedaron de acuerdo en que si suena alguna de estas, los otros deben hacer sonar la suya.
El día que intentaron robar a los clientes de Quishpe, Maribel Cantuña activó su alarma al escuchar la de su ‘veci’. “La próxima vez no solo ahuyentaremos a los delincuentes. Los agarraremos y haremos justicia con nuestras manos”.
La habitante también señaló que tienen chats comunitarios para alertar sobre personas sospechosas y existe una página en Facebook en la que suelen subir denuncias.
Hace dos semanas, cerca de esta zona, la Policía desarticuló a una banda delictiva que, al parecer, se dedicaba a extorsionar a los dueños de negocios y robar a los transeúntes.