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La Policía investiga las causas por las que asesinaron a las dos personas.Alejandro Giler

Baleados eran de Guayaquil

Los asesinaron en Manabí. Hasta ahora es un misterio lo ocurrido con la pareja residente del sur y norte de la urbe porteña

Por Manta, Manabí

15 de septiembre, 2020

Un sinnúmero de disparos acabaron con la vida de un ciudadano que tuvo más de 48 horas sin ser identificado. Según los agentes investigadores, se hallaron aproximadamente 25 orificios de entrada y salida. Las heridas de arma de fuego estaban localizadas principalmente en la garganta, pecho y tórax.

La mañana de hoy 15 de septiembre de 2020, sus familiares se acercaron hasta el Centro Forense de Manta para reconocer el cadáver. El occiso respondía a los nombres de Javier Lemos Cortez.

La víctima, de aproximadamente 37 años, según conoció EXTRA, residía en Las Malvinas, de la ciudad de Guayaquil, lugar hasta donde iba a ser trasladado para sus honras fúnebres.

En la misma agresión mortal falleció la también guayaquileña Kerly Elizabeth Castro Carpio, de 39 años, quien sobrevivió en primera instancia al ataque, pero horas después pereció en el hospital Verdi Cevallos Balda, de Portoviejo.

La mujer residía en el bloque 5 de Bastión Popular, indicó una fuente.

Según la Policía Nacional, Castro, quien presentaba antecedentes por asociación ilícita y tenía poco tiempo de haber cumplido con la pena por este delito, recibió dos disparos en la cabeza que derivaron en su muerte el domingo 13 de septiembre, a las 22:30.

Los peritos investigadores presumen que la mujer sí recibió los disparos en el lugar donde fue encontrada junto al cadáver de Lemos, en el sector Gregorio Hernández, de Jipijapa, porque allí hallaron solo dos indicios balísticos.

En cuanto a Javier Lemos se presume que lo trasladaron desde otro lugar donde, al parecer, lo acribillaron.

Por el sitio se hallaron vidrios de un vehículo posiblemente usado por los verdugos para abandonarlos junto a una cuneta.

Los moradores de esta zona aseguraron haber escuchado gritos desgarradores de una mujer, pero que al acudir a la escena se encontraron con la sangrienta novedad. (AG)