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Baleada por un celular y 25 dólares
Un mujer que regresaba de su trabajo fue víctima de robo. El delincuente le disparó en la pierna, la víctima murió debido a la grave herida.
“Por favor, me cuida a mis hijas”, fueron las últimas palabras que dijo Angélica del Rocío Vives Hernández, de 33 años, quien falleció debido a un disparo durante un robo.
El asalto ocurrió cerca de las 18:00 de lunes en un sector conocido como La Pileta en Monte Sinaí, noroeste de Guayaquil.
Según la madre de la fallecida, Rocío Hernández, su hija fue víctima de la delincuencia cuando regresaba de su trabajo. “Ella vendía jugos a las afueras del hospital del niño. Cuando ya estaba cerca a la casa, un sujeto la habría amenazado con un arma para que le entregue el celular y el dinero del trabajo. Ella quizás no quiso darlo y le dispararon”, manifestó la señora.
La madre de Angélica señaló que trasladaron herida a su hija al hospital de Monte Sinaí. “Tenía un solo disparo en el muslo izquierdo. Luego de decirme que cuide a sus hijas, se desmayó justo antes de entrar al quirófano, pero falleció al día siguiente”, dijo doña Rocío.
La señora añadió que su hija salía a trabajar todos los días para sustentar los gastos de sus tres hijas, de 13, 11 y 3 años.
Por su parte el esposo de la occisa, Víctor Vidal, manifestó que cuando ocurrió el robo de su esposa, él se encontraba trabajando. “Juntos queríamos salir adelante. Todos los sueños quedaron en nada, solo por un robo”.
El hombre dijo que en el lugar donde fue asaltada su amada, siempre se dan robos porque el sector es un punto estratégico para que las personas que viven por el sitio salgan a coger vehículos.
El jefe del distrito Nueva Prosperina, Pablo Guachamín, señaló que el robo y agresión a la señora no fue reportado el día de los hechos, sino al siguiente día.
“No pudimos montar un operativo por el sector porque nunca fue reportado el caso. Solo tuvimos el informe de los médicos cuando la fémina lamentablemente falleció”, sostuvo el oficial.
En el sitio donde se dio el robo, transeúntes aseguraron que los delitos son frecuentes. “Entre las cinco y seis de la mañana les roban a las personas que esperan carro. Los policías pasan, pero los delincuentes aprovechan cualquier descuido”, manifestó Victoria Gutiérrez, comerciante del sector.