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La caserita

Mientras Ana Julia sazona el almuerzo, su hija se encarga de contactarse con los clientes por celular.Gerardo Menoscal / EXTRA

Guayaquil: Hay fanesca todo el año en el Mercado Este

Ana Julia Márquez heredó el puesto de comidas de su madre, en el centro de abastos. Es famosa por sus desayunos y almuerzos, que son 'caída y limpia'

A las 04:00 empieza el día de Ana Julia Márquez (66 años), quien de lunes a sábado ‘doma la leona’ de los comensales del Mercado Este, ubicado las calles Gómez Rendón y Chimborazo, centro de Guayaquil.

Desde el cantón Durán se desplaza hasta el que es su segundo hogar, el centro de abastos porteño, sitio en el que ha laborado por más de cuatro décadas, junto a su madre, doña Colombia Díaz, quien inició el negocio de venta de desayunos y almuerzos.

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Los primeros en aparecer son quienes quieren llenar sus pancitas con el desayuno. Por lo general, ofrece sus clásicos muchines y torrejas de choclo, piqueos que cuestan 50 centavos. Y para que no se atore, por 50 centavos más puede saborearlos con un café caliente o un refrescante jugo. Algunos días prepara bistec y patacón, que son ‘caída y limpia’.

Hay quienes van con una ‘anaconda’ por dentro, pues se devoran dos o hasta tres muchines y se van bien ‘papeados’ a trabajar.

La ‘pípol’ también la busca porque les regala porciones de crujiente y sabroso cocolón.Gerardo Menoscal / EXTRA

Y es que por $ 2,50 usted puede degustar platos típicos como guatita, sancocho blanco, diversidad de secos (de pollo, chivo, chancho, carne) y más platos que no le dejarán seca la boca; al contrario, se le hará ‘agüita’. Y si va a llevar un apetitoso almuerzo, son 3 ‘latitas’.

Así como ella ayudó a su madrecita con el puesto, ahora Ana Julia cuenta con la colaboración de Alexandra (48), su hija, quien la suple los domingos, días en los que se toma libre. Aunque la doñita no para de trabajar, ya que hasta enferma va al puesto. Para ella, el ‘camello’ es su medicina.

  • Sazón del corazón

Desde varios puntos de la ciudad se acercan al puesto 13-1. Y es que no solo la sazón engancha, también la personalidad y buena vibra de Ana Julia y Alexandra.

Las guayaquileñas son muy amables y conversonas, por eso ‘pegan’ con sus comensales, a quienes les regalan su rica porción de cocolón.

Nos llaman por teléfono y nos piden que les separemos comida y la pasan recogiendo. En otras ocasiones, mi hija les va a dejar el almuerzo a la Bahía a unos clientes. Asimismo, me contratan para cocinar en eventos. Por ejemplo, recién prepararé arroz con menestra y carne frita para un bingo”, dice la adulta mayor.

Hay comensales que tienen años consumiendo los platos de doña Anita.Gerardo Menoscal / EXTRA

Para abastecerse, la cocinera les ‘hace el gasto’ a sus compañeros del centro de abastos. Solo se abastece de pescados en el mercado de la Caraguay, sur porteño.

  • Fanesca bajo pedido

Ana Julia es ‘la más buscada’ no solo por sus apetitosas preparaciones, sino también por su colada morada que prepara en noviembre y vende a $ 2,50 la tarrina.

También es famosa por su fanesca, la cual ofrece todo el año, bajo pedido (a $ 4 la tarrina). Si quiere saborear esta típica receta sin que sea Semana Santa, ya sabe a dónde tiene que ‘aterrizar’ y lo recibirán con gusto.

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