La mañana de este jueves, 12 de diciembre de 2024, fue encontrado sin vida un guardia de seguridad que había sido secuestrado el martes 10 de diciembre.

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El cadáver de la víctima, identificado como Joel Villacís, de 29 años, fue hallado a un costado de la vía, en el distribuidor de tráfico de la Autopista Narcisa de Jesús-Pascuales, en el norte de Guayaquil.

El hallazgo fue realizado por trabajadores de un negocio cercano, quienes al percatarse de la presencia de un cadáver en el lugar, inmediatamente alertaron a las autoridades. El personal del servicio preventivo, junto con agentes de Criminalística y de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas y Desapariciones (Dinased), acudieron al sitio para recabar indicios.

A la escena también llegaron los familiares de la víctima, quienes no ocultaron su profundo dolor y angustia ante la pérdida de su ser querido.

Les exigían $ 5.000

Los allegados de Villacís señalaron a la policía que los secuestradores se habían comunicado con ellos a través de una red social, exigiéndoles una suma de 5.000 dólares a cambio de devolverlo con vida. Sin embargo, a pesar de la desesperación de la familia, solo pudieron reunir una cantidad inferior a la que los delincuentes demandaban. A pesar de este pago parcial, los secuestradores finalmente decidieron ejecutar al joven.

El cuerpo de Villacís presentaba varios impactos de proyectil en el tórax, lo que indicaba que la víctima había sido asesinada de manera violenta, además de tener las manos atadas con una cinta de embalaje.

Tras la realización de las pericias iniciales en el lugar, el cadáver fue trasladado al Laboratorio de Criminalística y Ciencias Forenses de Guayaquil para llevar a cabo los estudios forenses correspondientes y determinar las causas de la muerte.

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