Con el gol entre ceja y ceja, la delantera Nayely Bolaños aparecía como una de las grandes figuras del fútbol femenino ecuatoriano, sin embargo, la ruptura parcial del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, en dos ocasiones, la apartó año y medio de las canchas.

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Una vez pasado ese mal momento, la jugadora de 21 años regresó el 2024 y llevó a su equipo, Dragonas Independiente del Valle, a disputar el título de la Superliga Femenina, que les ha sido esquivo en las dos últimas finales. La goleadora ha demostrado que recuperó su nivel al convertirse en la máxima artillera de la sexta edición del campeonato nacional, con 18 tantos en 19 partidos.

“Estoy feliz, creo que he pasado un proceso bastante complicado. Lo importante es que hubo personas que me ayudaron a no renunciar, porque ha sido muy duro y difícil, estoy contenta de estar de vuelta”, dice la atacante, quien será titular el sábado 21 de septiembre, en la final de vuelta ante Barcelona.

La idea de colgar los botines y dejar el fútbol rondó su mente por mucho tiempo. “Eso lo pensé porque fueron dos veces, reincidir en la misma lesión es un poco complicado y muy duro, la verdad”, confiesa.

Sin embargo, durante su recuperación encontró personas que la impulsaron a no abandonar su pasión, como la familia, sus compañeras, los dirigentes y el cuerpo médico, en especial la fisioterapeuta Singaly Delgado, quien estuvo todos los días junto a la atacante hasta que regrese a los partidos. “En el proceso de recuperación traté de ponerme en su lugar y estar siempre con ella en todo lo que necesita, ser empática y comprensiva”, asegura Delgado.

Tras recibir el alta, Bolaños le prometió a Singaly obsequiarle la camiseta luego de marcar el primer gol. Y no solo hizo uno, sino tres, en su retorno al fútbol competitivo. “Cuando me entregó la camiseta nos pusimos a llorar; fue un momento especial porque a pesar de que ella fue quien sufrió la lesión yo me sentía mal por lo que pasaba. Verla jugar fue un sentimiento de emoción”, recuerda la fisioterapeuta con la voz entrecortada.

La primera lesión sucedió jugando la semifinal de la Superliga Femenina, en 2022, y a los ocho meses, cuando estaba lista para retornar a las canchas, volvió a resentirse de la rodilla mientras entrenaba.

Nayely regresó más fuerte y lo demostró con el triplete en la primera fecha, ante Ñusta FC, que fue el inicio de una cosecha de goles que la tiene como la máxima anotadora de la Superliga, aportando para que Dragonas llegue a la disputa de la corona de forma invicta.

La seleccionada nacional agradece el respaldo de Independiente del Valle durante el tiempo de recuperación. “La verdad es que los dirigentes y todo el equipo me apoyaron y eso valoro mucho”, dice la delantera, que en la última fecha FIFA anotó en los partidos amistosos en Colombia.

“Estoy trabajando para cumplir con las expectativas que nos propusimos a inicios del año, que es ser campeonas. Además, estoy retribuyendo la confianza que han depositado en mí con goles”, enfatiza.

Pasados los duros momentos de las lesiones y reafirmando su contundencia, Bolaños se centra en la gran final, donde espera aportar con goles para que Dragonas pueda levantar el ansiado título, que se le escapó en las finales de 2022 y 2023 ante Ñañas y Barcelona, respectivamente.

Tiene claro que no pueden confiarse de la ventaja alcanzada en Guayaquil (1-0) ante un rival al que califica de “difícil y experimentado”.

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