El torneo nacional de ascenso de la segunda categoría de Ecuador es tan largo que se lo ha denominado “el infierno”, porque cuando llegan al sorteo los 64 equipos en los 32avos de la competencia, no saben dónde jugarán ni quién será el rival.

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Por ejemplo, Patria de Guayaquil deberá tener unas diez horas de viaje para recorrer los 500 kilómetros que lo separan de Cayambe, donde juega el Aampetra.

El ascenso de 2024 es una locura, ya que cuenta con jugadores que han sido figuras en el torneo de la A y en el fútbol internacional. Además, hay escenarios deportivos que son complejos y estadios que están en mal estado.

Por citar algunos casos, Jonatan Álvez, exjugador del Barcelona, y Christian Chavo Cruz, ambos están en Naranja Mekánica; Aldair Vásquez, ex del Ídolo, y Joao Paredes, que ha estado en varios elencos de la serie A y B, juegan en Astillero; Wacho Vera en Daquilema; y Jefferson Montero, que ha hecho su carrera en el exterior, juega en el equipo de su amigo Antonio Valencia, el AV25, rival de La Troncal.

El último refuerzo de este equipo es Sergio ‘Máquina’ Quintero, que ha sido figura en varios equipos y que ahora, llegado de Asia, se puso la camiseta del club en el que Toño Valencia es el entrenador.

El “infierno” comienza el 27 de septiembre del 2024 y, al final, tendrá a dos equipos en la serie B del 2025.

Los 32 partidos se los juega en cuatro días. Seguro que el lunes 30 de septiembre del 2024, las quejas serán por el estado de las canchas y la falta de seguridad.

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