El miércoles 2 de octubre, el Bombillo recibió una dura notificación del Banco del Pacífico: el embargo de sus bienes, incluyendo suites, palcos y estacionamientos del estadio George Capwell, escenario deportivo donde ayer el equipo volvió a ceder puntos ante su hinchada.

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El encuentro contra Aucas, el equipo más goleado del semestre con 15 tantos en contra en 8 partidos, se presentaba como una oportunidad ideal para que Emelec rescatara la situación.

Sin embargo, la baja producción para generar ocasiones de peligro y poca efectividad de sus futbolistas en el último tercio de cancha les pasó factura.

Esto se vio reflejado en el partido, cuando, a pesar de la tenencia local, principalmente por los embates de Romario Caicedo y Gustavo Cortez por las bandas, Emelec no logró sacar provecho de esos desbordes porque el volante Maicon Solís no tiene oficio de centro delantero.

El entrenador Leonel Álvarez sigue buscando soluciones, enfrentándose cada semana al reto de mejorar el rendimiento de un plantel que desaprovechó la oportunidad de acercarse a los puestos de repechaje a la Copa Sudamericana 2025, el único objetivo deportivo que le queda a los azules.

En la acumulada, Emelec ocupa la octava casilla con 32 puntos, y necesita sumar con urgencia para tratar de alcanzar la clasificación al torneo internacional. 

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