En la cooperativa Colinas de la Florida y en Mapasingue Oeste, en el norte de Guayaquil, dos clínicas de rehabilitación de consumo de drogas fueron clausuradas ayer. Estos sitios no tenían permisos para esa actividad y además operaban en malas condiciones.

El establecimiento cerrado en Colinas de la Florida fue intervenido la semana anterior, pero como allí continuaban personas supuestamente en tratamiento, las autoridades actuaron nuevamente.

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“No presta condiciones para poder brindar ningún servicio médico de salud. Se han encontrado sustancias estupefacientes, a las personas en mal estado”, indicó Gonzalo Ortega, intendente de Policía del Guayas.

Dentro había diez personas y agentes policiales los retuvieron para verificar si todos eran adultos o no. En caso de haber menores, tenían previsto llamar a sus padres para que los retiren.

En el lugar clausurado en Mapasingue Oeste, sus propietarios aseguraron que allí funcionaba una fundación. Sin embargo, no tenían un documento que respalde la legalidad de la institución.

En las clausuras actuaron el Cuerpo de Bomberos, el Municipio de Guayaquil, la Agencia de Aseguramiento de la Calidad de los Servicios de Salud y Medicina Prepagada (Acess), la Policía Nacional y la Policía Metropolitana. 

De acuerdo con datos de la Acess, en este año, en la zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón), 10 clínicas clandestinas han sido clausuradas. 

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